Caballeros, de vez en cuando está bien soltar todo el estrés que traemos del trabajo o de nuestros hogares, pero lo mejor es hacerlo con cosas ajenas a estos dos ámbitos, ya saben, para sacarnos de problemas. Entonces hoy haremos un ejercicio contrario al de relajación:
Vamos a enojarnos por cosas que pasan en la vida diaria, sacaremos toda esa frustración y seguiremos con nuestras vidas. Les apuesto a que no hay nada más irritante que lo que estamos a punto de ver, así que tomen aire, respiren profundo y empecemos a molestarnos por cosas que no nos incumben:
1. Si no le iban a echar ganas, mejor no hubieran hecho nada
